Dicen que hay heridas del alma que se abren durante la infancia, nunca curan y puede que tuvieran razón en un pasado, cuando la terapia infantil aún estaba en su etapa larvaria. Por suerte, el siglo XXI ha traído consigo toda clase de herramientas que permiten la detección precoz de trastornos de conducta, trastornos o enfermedades mentales.Este indudable avance conlleva una mejora de la calidad de vida de muchos niños que no tendrán que lidiar con su pasado cuando sean adultos ya que podrán afrontarlo «in situ».
$25.000,00
0% de descuento pagando con efectivo
Dicen que hay heridas del alma que se abren durante la infancia, nunca curan y puede que tuvieran razón en un pasado, cuando la terapia infantil aún estaba en su etapa larvaria. Por suerte, el siglo XXI ha traído consigo toda clase de herramientas que permiten la detección precoz de trastornos de conducta, trastornos o enfermedades mentales.Este indudable avance conlleva una mejora de la calidad de vida de muchos niños que no tendrán que lidiar con su pasado cuando sean adultos ya que podrán afrontarlo «in situ».